El Ayuntamiento de Salamanca presentará un recurso de casación ante el tribunal Supremo contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León que anuló la adjudicación del contrato del alumbrado en 2012.
Se trata de un contrato de 12 millones de euros en el conjunto de los cuatro años de duración. Como ya se está ejecutando, hay que pagar a Aceinsa y ahora, también, una indemnización a la otra empresa. Tras el fallo del TSJCyL del pasado mes de diciembre, el Ayuntamiento deberá desembolsar 720.000 euros a Etralux, ya que la condena al Ayuntamiento es pagar el 6% del contrato.
El fallo judicial indica que no se justificaba la baja “desproporcionada” (del 22%) con la que concursó Aceinsa para llevarse la prórroga del contrato, cuya primera consecuencia es que al pedir menos de lo que cuestan las cosas, ahora hay que ir ampliando el contrato.
El PSOE, que fue el único que votó en contra del recurso, indica que no pueden ir contra algo que ellos mismos denunciaron en 2012, cuando se adjudicó el contrato, y que el fallo del TSJCyL es fruto de «una chapuza de concurso público. Ustedes deben responder de sus errores», le dijo el concejal Arturo Ferreras al PP.
El concejal de Contratación, Carlos García Carbayo, dijo que la sentencia contra el Ayuntamiento es fruto del recurso que presentó Etralux (la empresa perjudicada por la prórroga del concurso) contra el fallo del juzgado de lo Contencioso de Salamanca que en abril de 2017 le dio la razón al Ayuntamiento.
El PP volvió a recibir el apoyo sincero de C’s. Su concejal Fernando Castaño dijo que «el contrato (adjudicado a Aceinsa) se ha cumplido a satisfacción de esta administración. La oferta a la baja al final no era tas desproporcionada. ¿Los jueces tienen la razón del mundo? Son personas con distintas opiniones. Yo creo en la injusticia, porque tras muchos años de ejercicio como abogado no conozco la justicia».
