El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas desaconsejan el uso de los cigarrillos electrónicos y de productos de tabaco sin combustión por los riesgos que conlleva para la salud.
Según las conclusiones de un informe elaborado por la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, dependiente del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, «los productos de tabaco por calentamiento generan un aerosol que contiene nicotina en proporción igual o superior a los cigarrillos con combustión, produciendo los efectos fisiológicos y adictivos de la nicotina, equivalentes al tabaco por combustión».
Por su parte, en los cigarrillos electrónicos, «se han encontrado sustancias cancerígenas en líquidos y vapor de cigarrillos electrónicos, por lo que no se pueden excluir los riesgos para la salud asociados al uso o exposición al vapor», explica.