El Complejo Universitario de Salamanca es uno de los once centros de referencia que aplican esta medicina en España. En concreto, ha tratado en menos de un año a once pacientes con las terapias de última generación CAR-T, toda una revolución en el abordaje de enfermedades oncohematológicas que, pese a su complejidad y alto coste, son una vía que cubre necesidades de pacientes que antes no tenían alternativa terapéutica.
S. Calleja/ ICAL. Constituyen el futuro de la medicina personalizada y de precisión en España; y la estrategia consiste en extraer y tratar en el laboratorio los linfocitos del paciente que, una vez modificados genéticamente, se administran de nuevo como medicamento para combatir a las células tumorales.
Aunque de momento es pronto para evaluar la eficacia final de los tratamientos, ya que hay que esperar 18 meses para una revaluación definitiva y confirmar la curación, todos han respondido al tratamiento, menos uno que ha progresado tras la terapia, según avanzó a Ical el jefe de Servicio de Hematología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, Marcos González Díaz, que es el servicio encargado de estas terapias.
Desde que administró el primer CAR-T, el 13 de mayo de 2019 en el ensayo clínico ZUMA-7, el Hospital Clínico Universitario de Salamanca ha infundido el CAR-T a ocho enfermos con Linfoma B difuso de célula grande (LBDCG), y a tres pacientes con Mieloma Múltiple.
De estos, cinco han sido ensayo clínico, en concreto dos con linfoma B difuso de células grandes han sido incluidos en el ensayo ZUMA-7, de Laboratorios Gilead, y tres con mieloma múltiple, en el ensayo KarMMa-02 y ensayo KarMMa-03, Laboratorio Celgene.
A ellos se suman otros cuatro pacientes a los que se ha realizado aféresis y el CAR-T está en fase de producción y expansión; tres con linfoma B difuso de células granes, y uno con mieloma múltiple. El centro estima que la infusión del CAR-T será en la última semana de este mes en dos de los cuatro casos, y el resto, a lo largo del mes de febrero. Los pacientes proceden tanto de Castilla y León como de las autonomías de Galicia, Castilla-La Mancha, Extremadura y Asturias, ya que el Hospital de Salamanca cubre el ala norte y oeste de España.
Los pacientes a los que se puede administrar CAR-T comerciales padecen linfomas no Hodgkin B difuso de célula grande, linfomas agresivos trasformados de linfoma folicular, linfoma B primario mediastino y leucemia linfoblástica aguda hasta 25 años.
En la actualidad hay ensayos clínicos en mieloma múltiple (KARMMA-02 y 03) y otros en fase de activación en el centro charro.
Top ten
El centro asistencial charro fue autorizado a finales de abril del año pasado como uno de los primeros ocho centros de referencia, ahora son once, para el uso de medicamentos CAR-T por su solvencia, experiencia y cumplir los requisitos recogidos por el plan para el abordaje de las terapias avanzadas en el Sistema Nacional de Salud con este tipo de medicamentos.
Por primera vez en la sanidad española los centros públicos estuvieron en condiciones de producir los tratamientos, para no depender exclusivamente de las compañías farmacéuticas, y ‘competir’ en la producción de este tipo de terapias.
Junto al Hospital de Salamanca, se acordó que la red estuviera integrada por:
- El Clinic de Barcelona, Vall d’Hebrón
- Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y Sant Joan de Deu
- El Hospital Clínico Universitario y La Fe de Valencia
- Gregorio Marañón y El Niño Jesús de Madrid
- Virgen del Rocío de Sevilla.
También, se autorizó como centros asistenciales adicionales al Instituto Catalán de Oncología, en el Hospital Duran i Reynals, en Hospitalet de LLobregat y en el Hospital Germans Trias i Pujol, en Badalona, así como al Hospital Universitario La Paz, en Madrid, y con carácter excepcional al Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín.
Para el jefe de Servicio de Hematología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca ser centro de referencia para estos tratamientos implica «seguir estando en la vanguardia en la aplicación de terapias innovadoras en enfermedades hematológicas» y, en consecuencia, que «los pacientes de Castilla y León puedan recibir los tratamientos más novedosos aunque sean complejos que han mostrado ser eficaces /curativos en las enfermedades hematológicas tumorales».