Salamanca cuenta con una Constelación Arqueológica, que suponen una nueva experiencia sensorial para redescubrir y disfrutar la ciudad. Esta iniciativa se incluye en el Plan de Sostenibilidad Turística de Salamanca, cofinanciado a partes iguales por el Ayuntamiento de Salamanca, por la Junta de Castilla y León y por el Gobierno de España.
Las constelaciones turísticas vinculan recursos patrimoniales temáticamente conectados y, en este caso, la constelación arqueológica ayuda a conocer el origen de la ciudad de Salamanca y su evolución a lo largo de la historia. Se trata de una nueva forma de disfrutar de la ciudad y su patrimonio, aprovechando la tecnología para mejorar la experiencia de salmantinos y visitantes.
La arqueología es uno de los recursos patrimoniales más interesantes en la ciudad y un nicho turístico de primer nivel, porque puede cambiar la percepción y la secuencia de un espacio y un tiempo. Así, no sólo revela qué sucedió y cuándo, sino que también invita a interpretar cómo ocurrieron los grandes eventos de la Humanidad. Salamanca es un claro ejemplo de cómo la arqueología contribuye a entender y valorar la evolución de un lugar desde sus orígenes hasta la actualidad.
Sobre todo, con la ayuda de las nuevas tecnologías, la arqueología permite ver lo invisible y transportar al turista hacia el pasado para intentar experimentar las sensaciones de quienes habitaron estos lugares.
Constelación Arqueológica, una experiencia única para todos los públicos
La Constelación Arqueológica une y articula cinco espacios de la ciudad a través de una experiencia única para todos los públicos: el Parque Arqueológico del Botánico, el Cerro de San Vicente, la Cueva de Salamanca, el Centro de Interpretación de las Murallas y el Pozo de Nieve. Con una inversión total de 23.916,60 euros, en cada uno de ellos se han añadido propuestas para disfrutar a través del paseo, visitas libres o guiadas y también gracias a la tecnología, la señalética digital, la lectura de códigos QR y las gafas 3D.
En concreto, se han instalado seis unidades de pantallas digitales táctiles en formato vertical: cuatro en este Parque Arqueológico del Botánico, una en el Cerro de San Vicente y una en el Pozo de Nieve. Cada uno de estos puntos cuenta con información detallada en español e inglés a través de fotografías, recreaciones visuales en 3D y locuciones. Un contenido también accesible mediante lectura fácil, audioguías y vídeos interpretativos en lengua de signos.
- El Cerro de San Vicente se puede visualizar, incluso oler en sus recuperadas laderas, cómo era la vida de los primeros pobladores de la ciudad y el porqué de ese emplazamiento.
- Parque Arqueológico del Botánico se puede experimentar a través de gafas 3D cómo era la Salamanca desaparecida y rememorar la primera excavación arqueológica de la ciudad que se llevó a cabo hace casi dos siglos en la Plaza de San Bartolomé en busca de los restos de Fray Luis de León.
- Cueva de Salamanca tendrán lugar actividades culturales que adentran al visitante en la magia y el misticismo de las leyendas y en el Centro de Interpretación de las Murallas se puede observar con detalle la evolución de la ciudad hasta nuestros días escrita en sus muros.
- El Pozo de Nieve se puede sentir el frescor almacenado de la Sierra de Béjar, donde se conjugan poesía, etnografía, historia constructiva y el misterio de los túneles bajo la ciudad, donde se encuentran los restos del Convento de San Andrés.