El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, no logró este jueves el respaldo parlamentario necesario para ser investido presidente del Gobierno en la segunda votación, al no recabar el apoyo de una mayoría simple de diputados.
Sánchez recibió 124 votos favorables (PSOE y Partido Regionalista de Cantabria), frente a 67 abstenciones (Unidas Podemos, ERC, PNV, Bildu y Compromis) y 155 votos en contra (PP, Cs, Vox, UPN, Junts y Coalición Canaria). En total se emitieron 346 votos, ya que los cuatro diputados que están en prisión tienen suspendidos sus derechos y prerrogativas.
Esta segunda votación, en la que hubieran bastado más votos a favor que en contra para que saliera adelante la elección de Sánchez, se produce 48 horas después, como marca el artículo 99 de la Constitución, de que el pasado martes no lograra la mayoría absoluta necesaria. Entonces, a favor de la investidura hubo 124 votos (PSOE y PRC), frente a 52 abstenciones (Unidas Podemos, PNV, Bildu y Compromis) y 170 votos en contra (Partido Popular, Ciudadanos, Vox, ERC y parte del Grupo Mixto).
Es la segunda vez que el líder socialista fracasa en una investidura. En 2016, Sánchez también sufrió una investidura fallida con 131 votos a favor (PSOE, Cs y Coalición Canaria) y 219 en contra (PP, Podemos, ERC, PNV, Bildu, PDECat).
Tras esta investidura fallida se abre un plazo de dos meses hasta la disolución de las Cortes y, tal y como se han sucedido los acontecimientos, si en medio no se produce una cuerdo que permita a un candidato sumar los votos suficientes para presentarse de nuevo a la investidura, votaremos el 10 de noviembre.