[dropcap]L[/dropcap]as clásicas tiran de clásicas es un clásico de verano. Parece un trabalenguas infantil, pero hablamos de economía en estado puro; de conocimiento de mercado y de saber a quién te diriges con el producto que ofreces. En este caso, es complicado porque su escaparate cambia cada semana y, al igual que Zara con sus colecciones semanales, logra conquistar a sus fieles.
Hola, Semana, Diez Minutos y Lecturas, las clásicas revistas del corazón, las que ‘peinan’ canas desde hace décadas vuelven a superarse en verano. Hacen que nuestras famosas se desnuden y luzcan sus cuerpos al sol, que dice la canción.
No hablamos de veinteañeras con pieles y cuerpos propios de su edad, no. Las cuatro ‘grandes’ han logrado que personas que también peinan canas, aunque se las tiñan, posen en bañador.
De menor a mayor. María José Suárez protagoniza la portada de Diez Minutos, es la más joven del grupo, y tiene 46 años; la sigue Belén Esteban, que sonríe con un bañador blanco en la portada de Semana, ya sopló 47 velas; las hermanas Campos, Terelu y Carmen, lucen lozanas en Lecturas con más de cincuenta y la reina de los posados de verano lo vuelve a hacer y a triunfar en Hola, Ana Obregón próxima a los setenta.
El mérito de estas cabeceras es mucho. Han logrado que iconos de la televisión o del papel couché se presten bajo exclusiva remunerada, como es el caso de Ana Obregón, cuyos beneficios irán destinados a la investigación del cáncer infantil; Belén Esteban, para lo que ella estime oportuno o las hermanas Campos ídem de lo mismo que la Princesa del pueblo, se despojen de sus atuendos.
La portada de Diez Minutos con la ex Miss España, María José Suárez, es distinta. Es exclusiva, sí, pero en este caso, parece que las fotografías son de agencia, por lo que el beneficio irá al profesional que ha conseguido las imágenes. Pero nunca se sabe, quizá los protagonistas hayan apalabrado con el paparazzi un ‘robado/pactado’.
Además, la valía también está en que conocen muy bien el cliente que tienen, al menos en papel. Público femenino mayores de cuarenta años que se han criado viendo a estos personajes en las revistas que se leían en las peluquerías. Sí, hubo un tiempo en el que las revistas del ‘colorín’ estaban frente a los espejos y entre los secadores.
Por último, tiene su aquel que sean publicaciones que han sobrevivido a la crisis del papel de 2008 y a la de la pandemia. Algo tendrá el agua cuándo la bendicen, sobre todo sabiendo que cuál ave fénix estas revistas se han sabido adaptar muy bien a la era digital. Quizá sea porque nacieron hace más de setenta años y todos hemos visto la resiliencia que tiene esa generación. Pueden con todo y siguen en la lucha.
Importante. No confundir las revistas del corazón, aquí no he incluido Pronto, pero solo porque sigue saliendo los lunes, con los programas de televisión. El corazón es un género propiamente español. Por su parte, las vísceras son ‘órganos’ de los tabloides ingleses que hemos exportado a la pequeña pantalla. Las revistas tienen sus lectores y los programas sus espectadores y unos y otros disfrutan con las vidas ajenas.