Una de las esculturas más bellas de Salamanca, la de Lázaro y el ciego, obra de Agustín Casillas, lleva 50 años mirando al Tormes y al Verraco del Puente
Homenaje a Agustín Casillas, en el cincuanta aniversario de la colocación de la escultura dedicada a Lazarillo y el ciego.