Dos emprendedoras salamantinas han sido premiadas con las becas concedidas por la Fundación PepsiCo por sus proyectos en el medio rural. Las galaronadas son las empresarias Melisa Comellas y Ángela María Hernández, que lideran negocios enfocados a la viticultura y a agricultura ecológica de verduras, hortalizas, plantas comestibles, huevos y miel.
Las becas han sido entregadas en el VIII Encuentro Ruraltivity de Fademur (Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales), una cita anual para emprendedoras celebrada en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. En total, la PepsiCo ha entregado diez becas valoradas en 5.000 euros cada una.
Melisa Comellas lidera el proyecto Dominio Noveno desde La Fregeneda, una pequeña localidad de 308 habitantes de la comarca de Vitigudino. Se trata de una bodega construida sobre viñedos antiguos, situados en el Parque Natural de Arribes del Duero. Desde Dominio nuevo, Comellas no solo acompaña a viticultores y pequeños agricultores en la mejora de la gestión de sus parcelas, sino que también elabora su propio vino. Con la beca, esta empresaria prevé consolidar su bodega, plantar más parcelas con variedades autóctonas y explorar actividades complementarias como la ganadería y el turismo rural.
Por su parte, Ángela María Hernández ha recibido la beca por su negocio La Charrita, situado en Santibáñez de Béjar (444 habitantes). Todo empezó con la construcción de una nave para albergar una huerta ecológica y un cercado adecuado para mantener y cuidar a gallinas camperas. El negocio arrancó en pleno confinamiento con la producción de miel y el cultivo de pequeñas hortalizas.
Actualmente, Hernández se dedica a la producción ecológica de huevos camperos, miel, hortalizas, verduras y plantas comestibles. Su intención es invertir la beca en la construcción de una sala de envasado para aprovechar el excedente de la huerta y hacer la explotación más sostenible.

Se trata del cuarto año que la Fundación PepsiCo colabora con Fademur para seguir impulsando las oportunidades laborales en el medio rural a través de la plataforma Ruraltivity. Todas las emprendedoras rurales premiadas desarrollan sus proyectos en pueblos de menos de 12.000 habitantes.
La lanzadera de emprendimiento Ruraltivity ha alcanzado 584 proyectos impulsados y ha extendido su presencia a nuevos territorios como Valencia, muy afectado tras los efectos de la dana.