[dropcap]L[/dropcap]os campanarios desde lejos erguidos, con las frentes altivas dominando el paisaje, incitan a penetrar en ese mundo rústico que la tierra castellano leonesa distribuye por sus contornos como algo consustancial a su propia existencia. Pueblos que en la lejanía del horizonte, nos hacen suponer la magia del pincel de los tiempos sobre esos decorados únicos que alimenta como un tesoro esta tierra.