
“No soy muy partidario de funerales pomposos, sino mas bien austeros”, dijo el ayer en las Cortes Juan Vicente Herrera durante la ultima sesión parlamentaria de control a la que se sometía tras 18 años presidiendo la Junta de Castilla y León. Lo decía en respuesta a la intervención de guante blanco con la que el socialista Luis Tudanca abrió el cupo de preguntas al presidente. Como quiera que Herrera ha dejado de ser su rival electoral, Tudanca se permitió un generoso gesto de reconocimiento hacia el presidente saliente, renunciando incluso a su turno de réplica (y no porque tuviera prisa por desplazarse a Salamanca, donde más tarde ejercía de telonero en un acto electoral protagonizado por Pedro Sánchez).
