Tito Vilanova falleció este viernes en Barcelona a los 45 años de edad después de luchar contra el cáncer desde noviembre de 2011.
Vilanova ingresó recientemente en la clínica Quirón de Barcelona aquejado de unos problemas intestinales que le había ocasionado su patología, hasta que su organismo se rindió este viernes.
Vilanoba, mano derecha de Pep Guardioa en el banquillo del Barça B y luego en el gran Barça que ha dominado el fútbol europeo durante media década, fue operado por primera vez en noviembre de 2011 de un cáncer en la glándula parótida. En abril del año siguiente asumió el cargo de primer entrenador del Barça tras la marcha de Guardiola, con quien compartió cinco años en los banquillos del equipo blaugrana.
En diciembre de ese mismo año recayó y comenzó un periodo de idas y venidas a Nueva York donde permaneció varios meses hasta que en abril de 2013 se reincorporó para terminar la temporada y ganar la liga en su primer y único año como técnico del Barcelona.
El abandono
En julio comunicó al presidente, Joan Rosell, que dejaba definitivamente el banquillo para luchar contra su enfermedad que finalmente ha acabado con su vida este viernes.
El Barcelona habilitará este sábado un espacio en la tribuna del Camp Nou para que los aficionados que lo deseen puedan expresar sus condolencias por la muerte de Tito.
