El secretario general del PSOE de Castilla y León y candidato a la Junta, Luis Tudanca, remitió este viernes una carta al candidato de Ciudadanos a la Presidencia de la Junta, Francisco Igea, en la que defendió que Castilla y León “no puede esperar más”. Por eso, instó al líder de la formación ‘naranja’ en la Comunidad a iniciar los contactos formales entre los dos partidos de manera “urgente” para “dar pasos” en la configuración de un proyecto que confiera a Castilla y León “estabilidad y progreso”.
Las conversaciones entre el Partido Popular y Ciudadanos para alcanzar un acuerdo sobre la gobernabilidad de Castilla y León no avanza en las últimas horas ante la exigencia planteada por la formación ‘naranja’ sobre la limitación de mandatos a ocho años, con efectos retroactivos, tanto para los integrantes del futuro ejecutivo autonómico, como en ayuntamientos y diputaciones provinciales.
El secretario de Acción Institucional de Ciudadanos y coordinador del órgano negociador de pactos de este partido, José María Espejo-Saavedra, rechazó este jueves una negociación en “paralelo” con el secretario general del PSOE de Castilla y León y candidato a la presidencia de la Junta, Luis Tudanca, mientras se está dialogando con el PP para formar un gobierno en la Comunidad, y recordó, en declaraciones a RNE, que el dirigente socialista es un “acérrimo” sanchista.
El secretario general del PSOE de Castilla y León y candidato socialista a la Junta, Luis Tudanca, reconoció este jueves estar tranquilo después de que PP y Cs iniciaran ayer las conversaciones para intentar formar Gobierno en la Comunidad porque insistió en que los socialistas no dan “la batalla por perdida” porque queda mucho trabajo por hacer. De cualquier forma, y ante la posibilidad de que puedan fructificar las negociaciones entre los ‘populares’ y la formación naranja, Tudanca no quiso ponerse “la venda antes que la herida” y advirtió a Ciudadanos de que un Gobierno en el que estuviera presente el PP “no es un cambio de ninguna de las maneras, lo justifique como lo justifique”.
El Partido Popular y Ciudadanos alcanzaron este miércoles un principio de acuerdo para negociar un programa de Gobierno para Castilla y León de cambio y moderado del que según ambos los beneficiados serán los ciudadanos de la Comunidad, en una reunión en la que antepusieron los principios programáticos a las personas. Esto ocurre el mismo día en que un juez de Salamanca abre diligencias para investigar la presunta financiación ilegal de la campaña de Mañueco en sus primarias, en concurrencia con coacciones y falsedad documental.
El secretario provincial del PSOE, Fernando Pablos, se mostró partidario este miércoles de desalojar al PP de cuantos ayuntamientos sea posible, incluso aunque haya sido el partido más votado pero el resto de las fuerzas políticas puedan formar una mayoría alternativa.
Los equipos negociadores de Ciudadanos y el Partido Popular mantendrán este miércoles la primera reunión destinada a alcanzar un acuerdo de Gobierno en Castilla y León después de los resultados de las elecciones del pasado 26 de mayo y del decálogo que marcó el lunes la formación naranja para fijar las conversaciones con las fuerzas políticas. El PSOE, que ganó las elecciones, confía en que Cs no impida un cambio histórico en la región.
El Comité Ejecutivo Nacional de Ciudadanos, del que forma parte el candidato de Cs a la Junta, Francisco Igea, aprobó este lunes un decálogo que servirá de base para la negociación de pactos con otras formaciones, en las que el PP será el “socio preferente”, si bien podrían llegar a acuerdos puntuales con el PSOE. Además, la formación descarta sentarse con Vox.
Una semana después de las elecciones municipales y autonómicas el Ayuntamiento de Salamanca ha quedado en manos de Cs, que determinará si mantiene al PP o si opta por propiciar un cambio histórico en la ciudad del Tormes.
La Junta Electoral de León concedió este viernes un tercer concejal a la Unión del Pueblo Leonés en la capital y deja fuera a Vox, lo que -de convertirse en dato definitivo- acercaría la posibilidad de un pacto de gobierno entre PSOE y los leonesista, al margen de la postura que adoptase Ciudadanos, que cuenta con cuatro ediles, frente a los diez del PSOE y nueve del Partido Popular.